El Juzgado de lo Social número 3 de Talavera de la Reina (Toledo) ha reconocido, por primera vez en España, a raíz de una demanda de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), la enfermedad profesional a una persona que trabaja en el sector sanitario que se contagió de Covid-19, un administrativo de un centro de salud.

Pese a sufrir en dos ocasiones una Incapacidad Temporal (IT) por síndrome respiratorio agudo derivado del Covid-19 y, posteriormente, disnea y alteraciones respiratorias, tanto la seguridad social como la mutua colaboradora Solimat le denegaron el reconocimiento de la enfermedad profesional.

Sin embargo, la magistrada-juez Cristina Peño Muñoz concluye que está acreditado que esta persona sufrió un primer proceso de incapacidad temporal con diagnóstico de síndrome respiratorio agudo severo asociado al coronavirus y, por tanto, que sufrió una enfermedad recogida en el listado de enfermedades profesionales.

También considera probado que estuvo expuesto a un riesgo de exposición al coronavirus en su profesión.

Respecto a la segunda incapacidad temporal con el diagnóstico de disnea y alteraciones respiratorias, la juez afirma que no existen dudas de que son consecuencias derivadas del contagio por Covid-19 y que, en consecuencia, debe ser considerada igualmente enfermedad profesional.

Así las cosas, estima la demanda de CSIF contra el Instituto Nacional de la Seguridad Social, la Tesorería General de la Seguridad Social, la mutua Solimat y el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) sobre determinación de contingencia y declara que el proceso de IT sufrido por el trabajador del 13 de septiembre al 22 de octubre de 2020 y del 23 de octubre al 15 de enero de 2021 fue derivado de enfermedad profesional.

La sentencia es la número 5 /2021, de 21 de mayo.

Contra la misma cabe recurso de suplicación ante el Tribunal Superior de Justicia.

El afectado ha estado representado por la abogada de CSIF Beatriz Fernández Rodríguez.

«Estamos ante la primera sentencia que reconoce el Covid-19 como una enfermedad profesional, corroborando lo que CSIF siempre ha defendido desde el principio de la pandemia que el contagio del coronavirus debe ser reconocido como enfermedad profesional para todos los que prestan servicios en centros sanitarios», ha señalado a Confilegal la secretaria nacional de Prevención de Riesgos Laborales del sindicato, Encarna Abascal.

Recuerda que «el Gobierno solamente consideró el contagio por Covid como accidente de trabajo asimilado a enfermedad profesional a efectos de prestaciones durante la declaración de la pandemia, lo que excluye la cobertura de posibles secuelas a largo plazo, posibles incapacidades e indemnizaciones por fallecimiento».

Reconoció la contingencia de enfermedad profesional solamente para personal sanitario y sociosanitario, excluyendo al resto de categorías profesionales que trabajan en entornos con riesgo de covid, como los administrativos, el personal de limpieza, mantenimiento o seguridad.

«Esta sentencia es un primer paso y esperamos conseguir muchas más, ya que tenemos centenas de reclamaciones en vías de efectuarse y sabemos que muchos profesionales quieren reclamarlo», indica Abascal.

DENUNCIA QUE ‘A MÁS DE 100.000 SANITARIOS NO SE LES ESTÁ RECONOCIENDO EL COVID COMO ACCIDENTE DE TRABAJO’

La secretaria nacional de Prevención de Riesgos Laborales de CSIF asevera que hasta el pasado mes de marzo se han registrado 13.252 accidentes de trabajo por Covid-19 entre las personas que trabajan en el sector sanitario, 24 de ellos mortales, aunque, según las cifras publicadas por el Ministerio de Sanidad 128.280 profesionales se han contagiado de Covid-19, lo que supone que «sólo se están reconociendo como accidente laboral por Covid-19 un 10% de los casos en el personal sanitario».

«Estamos hablando de unas cifras escandalosas, ya que significan que a más de 100.000 sanitarios no se les está reconociendo el Covid-19 como accidente de trabajo», denuncia Abascal.

El presidente del sector de Sanidad de CSIF, Fernando Hontangas, también critica la actitud que han mantenido las administraciones hacia estos profesionales, el «peor maltrato» que ha habido en la historia de la Sanidad.

A su juicio, no se ha querido declarar enfermedad profesional porque las administraciones no han tenido la capacidad de realizar un seguimiento de los casos.

CSIF exige que se reconozca esta enfermedad profesional a todos los profesionales que prestan servicios en centros sanitarios y se refuercen los servicios de prevención en los centros.

FUENTE: Confilegal (Rosalina Moreno)