La Audiencia Provincial de Sevilla ha condenado a 15 meses de cárcel por un delito de homicidio por imprudencia grave a un hombre acusado de dejar morir en octubre de 2014 a su madre enferma de cáncer en una vivienda de la capital hispalense.

El acusado iba a ser enjuiciado por un jurado popular a partir de este jueves, aunque la vista oral finalmente no se celebrará tras la conformidad alcanzada entre la Fiscalía, la defensa y el propio encausado, que pidieron que se dictara sentencia de conformidad con la calificación de mutuo acuerdo plasmada en escrito de 19 de abril de 2018, que consideraba que los hechos eran constitutivos de un delito de imprudencia grave con resultado de muerte.

De este modo, y de estricta conformidad con las partes, la Audiencia declara probado que el acusado convivía “esporádicamente” desde marzo de 2014 con su madre en una vivienda de la capital hispalense que “carecía de las condiciones mínimas de habitabilidad sin apenas fuentes de luz, gran suciedad en la cocina” y el baño “prácticamente inutilizado”.

La madre del acusado padecía un cáncer de pecho “en estado avanzado” del que “por voluntad propia no se trataba”, mientras que el condenado “apenas atendía a su madre pese a que fue conocedor del estado avanzado de su enfermedad, ni hacía nada para que recibiera una atención médica adecuada”.

En julio de 2014, una persona no identificada llamó al teléfono del mayor del Ayuntamiento, anunciando la situación en la que se encontraba la mujer, de forma que el 21 de julio personal de los servicios sociales municipales se presentó en la vivienda mencionada y “pudieron comprobar la situación” de la fallecida y “el grado de semi-abandono” del piso.

Según expone la Audiencia, el acusado, “pese a que pudo ser consciente de la situación y de su obligación de actuar, con notoria negligencia nada hizo y de esta forma su madre se iba consumiendo día a día”, tras lo que la mujer falleció el día 6 de octubre de 2014, momento en el que “apenas pesaba 25 kilos, era de una delgadez extrema consecuencia de su falta de alimentación y era perfectamente visible la tumoración en su mama izquierda”.

“De haber mediado una rápida y eficaz atención médica y si se le hubiera proporcionado una alimentación adecuada”, la madre del acusado “podría haber salvado su vida”, señala la Audiencia, que condena al inculpado a 15 meses de prisión por un delito de homicidio por imprudencia grave, acordando la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad impuesta por un plazo de dos años, que se podrá revocar si el condenado volviera a delinquir durante el plazo fijado.